domingo, 23 de noviembre de 2008

La vida...



Dicen que una vez un periodista le preguntó a Lennon qué era para el la vida, a lo que Lennon respondió "La vida es lo que te pasa mientras estás ocupado en otros planes."

Cuando me paro a pensar sobre algo tan inmenso, a veces tan concreto otras tan abstracto, me imagino un océano, un océano lleno de olas y a la vida como una de esas olas.
Una en cuyo camino se puede juntar con otras , que le ayudan, que le dan fuerza, que la acompañan, que a veces pierden su fuerza o que simplemente encuentran arrecifes que se oponen a su camino, a su destino.
Un destino que al igual que una vida es morir, morir tranquila, plácidamente en una playa, a veces jugueteando mágicamente con la arena o tocando suavemente unos pies descalzos. Otras veces sin embargo llegan con tanta fuerza que acaban arrasando aquello que encuentran a su paso.
Aunque muchas veces las ves de lejos grandes, con brío y tú las esperas flotando con los brazos abiertos deseando recibir ese balanceo, balanceo que nunca acabas recibiendo porque con el mismo ímpetu con el que se presentó se esfumó.

Tal vez la vida se resuma en eso, en conseguir acabar llegando a una playa y tal vez muchas veces no podamos escoger esa playa que es nuestro destino.
Prefiero pensar que a la playa que lleguemos será el conjunto de cada paso que demos en el mar, de la cantidad de olas que se junten con nosotros y nos den fuerza, de cómo consigamos saltar los arrecifes, las barreras que sin duda nos encontraremos.
Al menos quiero pensar eso, aunque tal vez deberíamos preguntárselo a una ola. Y creo que así lo haré me tumbaré cerraré los ojos y esperaré recibir su suave balanceo, mientras le preguntó ¿era este tu destino?...